jueves, 17 de abril de 2014

Ahora si miro al horizonte sólo veo tu cama.

Estoy segura de que aquí tarda más en ponerse el Sol
sólo porque no andas tú pululando por las calles
haciendo que hasta el tiempo corra
a ver si puede tocarte
Tú me dirás
qué puta locura es esta
de girarme en el sofá y no verte tras mi espalda
de buscarte en cualquier rotonda
frente a cualquier poste de luz
como si no fueses tú quien enciende media ciudad
cuando despiertas
Te expongo la situación:
tú estás donde yo no puedo alcanzarte
y yo estoy donde tú no puedes verme
sin embargo
cuando hace frío sólo hay manta si pienso en tus brazos
y si te oscureces yo abro los ojos para que veas a través de mí.

No quiero hablarte de mariposas pero eres la jodida primavera
que llama a mi puerta con la sombra cargada de flores
y yo que andaba llena de venas muertas
dejándolas caer a mis costados
manchándome las manos pegándole a las paredes
ahora veo campo donde antes había suelo
y riego las semillas de tu boca
con la incansable humedad de la mía.

Ha sido bonito el mito de mis taquicardias sin motivo
y los temblores absurdos y repentinos
pero te he encontrado
(has aparecido llamado usurpado secuestrado
conquistado arrebatado allanado)
y ahora es tuya
toda responsabilidad.